viernes, febrero 20, 2004

El pool de almas

Desde hace tiempo tengo una teoría conocida por algunas personas sobre lo que llamo “el pool de almas”. Muchas veces me toca defender esta teoría, aunque poco a poco gano seguidores. A continuación relataré un breve resumen de esta teoría, esperando obtener algún tipo de crítica por parte del lector:

Existe un espacio (no físico), más allá de nuestro entendimiento, donde está el pool de almas. Se podría describir como un gran redil o biblioteca donde existe un número finito de almas. Este número a veces varía, pero muy de vez en cuando. Cada vez que un ser vivo nace, se le asigna un alma de este pool (ala DHCP); de la misma manera, cada vez que un ser vivo muere, su alma vuelve a este redil, que a partir de ahora lo llamaremos “Campo de Sinergías” o en un lenguaje superior, “Mesena”. Siguiendo con el parecido con el DHCP, hay almas ya preasignadas, es decir, existen seres vivos que contínuamente viven con el mismo alma (la razón de este comportamiento será explicada más adelante). De esta forma, se explica la reencarnación. Todos los seres vivos “normales”, cada vez que nacen, obtienen un alma que ha vivido ya numerosas vidas, tanto como ser humano como animal, insecto, planta, ... También es por ello por lo que muchos seres vivos tienen reminiscencias de esas vidas anteriores, puesto que el “portador” de un alma va añadiendo características de esa alma, y siempre deja algún tipo de huella o señal en el alma que posee. En el momento en que se deja una huella en esa alma, tenemos la oportunidad de ver características o huellas pasadas, he ahí la explicación a ese fenómeno.

Dentro de la Mesena, existen las figuras del Pastor, del Pastor de Almas. Estas figuras se encargan de comprobar que el proceso funciona bien, y eliminan o crean almas si es necesario (aunque rara vez es necesario). Los Pastores de Almas también están inmersos en el proceso, pero poseen aptitudes sobre los demás, son capaces de poder ver y hablar directamente de alma a alma, independientemente del poseedor; supongo que sabréis a quién me refiero, todos conocemos a personas que vemos que tienen un sexto sentido con las cosas, que saben tratar a la gente, que parece que les va todo bien o que la suerte les acompaña siempre, esos son.

El resto de detalles sobre el proceso quizás no sea tan relevante como esto, pero si cualquier lector le gustaría saber más, es posible seguir contando más datos sobre ello.

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